Una firma, mil emociones: mi experiencia en Linkstart 2025 (Santiago, Veraguas)
30 de abril de 2025

🌟 Un evento esperado (y necesario)
Linkstart se ha convertido en uno de los eventos más importantes del país relacionados con el manga, anime y la cultura pop japonesa, especialmente en la región de Santiago de Veraguas. Reúne a visitantes de todas las provincias, con espacios dedicados al cosplay, los videojuegos, los snacks asiáticos y, claro, la pasión por la animación nipona.
En mi caso, la razón para asistir era bastante clara: necesitaba un respiro. Lo había decidido hacía más de dos meses. Cuando salieron los boletos en preventa, los compré sin tener aún un presupuesto definido (eso lo resolvería más adelante). Pero todo se elevó a otro nivel cuando se confirmó que habría un invitado especial de doblaje: Georgina Sánchez —la voz de Kikyo en Inuyasha, Nami en el doblaje de One Piece (Netflix), y Asuka Langley en las películas Rebuild of Evangelion (Prime Video).
Para mí, eso lo cambiaba todo. Era la primera vez que un actor de doblaje visitaba mi provincia, un lujo normalmente reservado para eventos de Ciudad de Panamá como la Comic-Con.
Aclaración: no fui como prensa, así que mis fotos y videos son más personales que documentales —otros medios digitales sí tenían cobertura oficial.

🛣️ Llegar, explorar y observar
El evento se realizó en el Centro de Convenciones COOPEVE, un espacio amplio y bastante versátil. Aunque ya se han hecho otras ediciones del Linkstart allí, esta vez el acceso fue algo confuso. Como usuario de silla de ruedas, tuve que entrar por una zona lateral por donde también bajaban autobuses llenos de asistentes, cosplayers y tiendas.
En un inicio, el público era escaso. Pero en menos de media hora, el ambiente se transformó: adolescentes, jóvenes adultos y mucho cosplay llenaban cada rincón. Con mis 33 años ya sentía que era de los “veteranos“ en la sala 😅.
Entre los stands, había de todo: Funko Pop!, figuras, pósters, snacks japoneses y coreanos, y accesorios para cosplay. También talleres de Pokémon TCG y espacios de intercambio, más orientados al juego competitivo que al coleccionismo. Aunque debo decir… vi a un niño de unos 7 años con un binder lleno de joyas recientes como Temporal Forces y Surging Sparks. Lo envidié un poco. Bueno, bastante 😂.

✍️ El momento más especial: la firma con Gina
Y entonces, llegó el momento que esperaba con ansias: la firma con Georgina Sánchez (o “Gina”, como la conocen en el medio). Estaba nervioso. No había preparado mensaje, ni sabía bien qué grabar. Solo sé que, cuando llegó mi turno… lloré un poco de la emoción.
Grabamos un clip corto (que quizás algún día publique). Solo daré una pista: los fans de Evangelion y los memes sabrán apreciar un buen “¡Feliz jueves!”.
No logré comprar una figura firmada —volaron mientras recorría los demás stands—, pero sí conseguí un póster grande con dedicatoria. Fue un detalle que me recordó por qué me enamoré del anime desde niño… y que guardaré como un verdadero tesoro. Además, fue súper amable y nos regaló a mí y a mi hermana un caramelo mexicano que sabía literalmente a gaseosa y al pedir un video de “Feliz Jueves“ me regaló un pin especial, algo que no estaba incluido en el paquete.

🛍️ Más vueltas, compras y anécdotas
Luego vino la parte divertida: más vueltas por los stands con mi hermana. Como regla familiar, siempre exploramos todo antes de comprar.
Una de las anécdotas más curiosas fue cuando visité el stand de una cosplayer con contenido adulto. Terminé conversando un rato con ella y otras chicas, comprando unas adorables figuras impresas en 3D (¡nada de cosas subidas de tono, ¡lo juro!). Incluso le acomodé la página de su álbum para que lucieran sus postales de anime… y justo después alguien le compró. Lo hiciste bien, Richard. Lo hiciste bien. 😎
Finalmente, me llevé algunas camisetas de anime con tinta luminosa para mi sobrino, mi hermana y hasta para mi mamá. Sorprendentemente, encontré una de Mazinger Z, el primer anime que ella vio siendo niña. También le compré a mi sobrino una figura de Goku SSJ4… y, para mí, una de Minato Namikaze que ya está en mi escritorio.

💭 ¿Lo repetiría? Sin dudarlo.
La experiencia valió totalmente la pena. Hice contactos con tiendas para pedidos especiales, me reí mucho, comí snacks que me cayeron pesados (ese Buldak de Samyang me dio batalla), y compré cosas que ni recuerdo. Pero lo más importante fue todo lo que me llevé emocionalmente: nostalgia, comunidad, y una conexión directa con un mundo que me apasiona desde niño.
Ya se confirmó una próxima edición para 2026, con un nuevo invitado internacional. ¡Y claro que estaré allí!
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